TDI

Los motores de turbo inyección directa, más conocidos por las siglas en inglés de Turbo Direct Injection, TDI, son unos motores que cuentan en la parte superior del pistón con una cámara de combustión, en la cual se inyecta el combustible de manera directa, sin requerir una precámara.

Además de la inyección directa de combustible, estos motores cuentan con tecnología turbodiésel. Este sistema, realiza una compresión del aire que entra en el motor obteniendo mayor potencia y par a la salida, sin la necesidad de contar con una cilindrada mayor.

El funcionamiento de este tipo de motores TDI comienza con la intervención del turbocompresor, este elemento de sobrealimentación tiene como finalidad proporcionar aire al motor, llenando correctamente los cilindros. Cuando la turbina gira con el paso de los gases de escape, provoca la entrada de aire durante la admisión en los cilindros, gracias a un compresor unido al eje de la turbina, aumentando el rendimiento del motor.

El siguiente proceso que se llevará a cabo es la compresión de la mezcla, pero en este tipo de motores, el combustible se inyecta de manera directa y a una presión muy elevada. Este proceso se desarrolla gracias a unos inyectores que se activan mediante una corriente eléctrica, funcionan más rápidamente que los inyectores comunes, ya que la entrada de combustible se divide en varias pulverizaciones, aumentando la suavidad y disminuyendo el consumo de combustible.

Los motores TDI ofrecen varias ventajas y se caracterizan por:

• Ser motores más potentes y consumir menos combustible: Tienen un par alto durante un amplio régimen de revoluciones y una potencia alta con un consumo reducido.
• La conducción de vehículos con motores TDI es más suave, ya que las revoluciones de estos son más bajas, pero contando con una potencia elevada.
• Por último, los motores TDI se caracterizan por su alta eficiencia y rendimiento, con un consumo de combustible y unas emisiones reducidas.

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